Julio Bocca y el Ballet Nacional de Cuba
Y en consecuencia con las crónicas culturales de La Habana que he estado escribiendo, este fin de semana tuve la oportunidad de asistir a la presentación en el Teatro Nacional de La Habana de la clásica obra "El lago de los cisnes" con el prodigioso bailarín argentino Julio Bocca en el papel del Príncipe Siegfried.
Tuve también la dicha de ver por primera vez en mi vida a un querido amigo actuar en vivo: Félix Rodríguez, uno de los bailarines principales de la compañía.
Entre los aspectos más relevantes a señalar se encuentra en acompañamiento musical de La Orquesta Sinfónica Nacional, sencillamente excelente. Y la escenografía, muy impresionante sobre todo en el segundo y tercer actos. Las magistrales interpretaciones de Julio Bocca y de la bailarina cubana Anette Delgado en el papel de la princesa Odette son también dignas de destacar. En fin, todo un buen espectáculo del más alto nivel.
5 comentarios:
Julio Bocca me la tiene pelada (que feo que suena eso), viene anunciando su retiro hace como tres años masomenos. Igual hubiera dado todo por verlo de Sigfrido en el Gran Teatro de La Habana.
No sabía de su tan anunciado retiro. De hecho no soy muy conocedor de Ballet, pero aunque voy a verlo muy esporádicamente, como ahora, y lo aprecio. Claro que requiero de la necesaria introducción para entender la obra, pues entender el ballet no es fácil.
Y por cierto, no es que sea tan importante, pero no fue en el Gran Teatro de La Habana, sino en la sala Avellaneda del Teatro Nacional, frente a la Plaza de la Revolución. Fue este sábado pasado, 4 de noviembre.
En La Habana en todo caso, me habría gustado verlo en La Habana.
Eso me pasa por leer los entre líneas y no leer lo que esta escrito, que recién acabo de releer y me he dado cuenta que decías que había sido en el Nacional.
Tampoco soy muy fanático del ballet, me gusta y lo entiendo bastante (más por cierta intuición que tengo respecto a las artes escénicas, que por dominio de la técnica)
Si, vi el gato. Y lo que más me llamó la atención es que una persona que iba conmigo, y que es mucho más asidua a funciones de ballet (ha trabajado durante años en los festivales de ballet) me dijo que en numerosas ocasiones ella ha visto que sueltan un gato en la escena.
Así que parece que fue intencional, lo que no se es quién lo hace ni con qué intención. Curioso, no?
Pero casi siempre los que se consideran de mala suerte son los gatos negros. Aunque es verdad que a mucha gente no les gustan los gatos, pero a los que les gustan, casi que los llegan a venerar. Tienen algo misterioso y tenebroso los gatos, no?
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