martes, marzo 27, 2007

La procesión se lleva por dentro

"Resulta difícil hacer a un hombre comprender algo cuando su trabajo depende de que no lo entienda." dice Upton Sinclair.

Y es que debe ser difícil para muchos funcionarios y ocupantes de cuanto cargo hay en la complicada madeja de gobierno de este país, comprender que el barco se hunde, que la han cagado, que esto se podía salvar (quizá aún se puede, porqué descartar milagros?), pero que por el camino que vamos no se salva nada.

No debe ser fácil ver cómo les deshacen un proyecto de país por el que han entregado sus mejores años y que nada pueden hacer, y además por si fuera poco, tienen que seguir creyendo dentro de si mismos, o por lo menos aparentar, que siguen el discurso oficial, que estamos haciendo acá ese mundo mejor que dicen que es posible.

Y claro, aquí me refiero a los que de manera sincera sufren por dentro lo que toda una vida de empeños les impide hacerlo explícito. Que también los hay en cantidades industriales que viven de oportunistas todas las facilidades y comodidades que les brinda el ser funcionarios del sistema. Ya lo decía Martí en su genial escrito La futura esclavitud, cuando advertía que

Todo el poder que iría adquiriendo la casta de funcionarios, ligados por la necesidad de mantenerse en una ocupación privilegiada y pingüe, lo iría perdiendo el pueblo, que no tiene las mismas razones de complicidad en esperanzas y provechos